Los problemas de hiperpigmentación se desencadenan por la sobreexposición al sol.
La hiperpigmentación es causada por una sobreproducción de melanina, el pigmento natural que le da color a la piel. Esta sobreproducción puede ser provocada por una variedad de factores, pero el más común es la sobreexposición al sol. Los rayos de luz UVA, UVB y HEVIS están relacionados con problemas de pigmentación y pueden contribuir a afecciones como manchas de la edad (también conocidas como manchas solares) y melasma.
Los síntomas de PLE aparecen uno o dos días después de la exposición a los rayos UV.
La investigación sugiere que la propensión a las alergias al sol es genética, pero que el 80% de los casos son provocados por los rayos UVA. Cuando las personas tienen la afección subyacente, su sistema inmunitario identifica y reacciona contra áreas de la piel alteradas por el sol produciendo una erupción cutánea.
Los rayos UVB que provocan quemaduras solares y dañan el ADN celular directamente pueden, en el peor de los casos, causar enfermedades de la piel como queratosis actínica (parches de piel secos, rojos o escamosos que pueden ser dolorosos pero inofensivos si se tratan) y cáncer de piel.
Los médicos y dermatólogos advierten cada vez más sobre la fuerte correlación entre el sol y el cáncer de piel. Existen tres tipos principales de cáncer de piel:
La exposición excesiva a los rayos UV es la principal fuente de cáncer de piel.
Los cambios en la piel deben ser revisados por su médico.
Los cánceres de piel de células basales aparecen como pequeños bultos rosados o rojos de crecimiento lento y brillantes. Se encuentran con mayor frecuencia en la cara, el cuero cabelludo, las orejas, las manos, los hombros y la espalda.
El carcinoma de células escamosas suele ser protuberancias rosadas. Pueden tener piel dura o escamosa en la superficie y se encuentran con mayor frecuencia en la cara, cuello, labios, orejas, manos, hombros, brazos y piernas.
El melanoma es el tipo más grave de cáncer. El primer signo es a menudo la aparición de un nuevo lunar o el cambio en la apariencia de un lunar existente. Los melanomas tienen más probabilidades de tener una forma irregular, tener más de un color y ser más grandes que 6 mm. Se pueden encontrar en cualquier parte del cuerpo, pero la espalda, las piernas, los brazos y la cara son los lugares más comunes.
Si está preocupado de alguna manera por lunares o bultos en su piel, consulte a su médico.
Varios factores externos e internos pueden influir en la forma en que nuestra piel reacciona a los rayos solares:
Nuestra ubicación geográfica, la estación, el clima y la hora del día impactan en la intensidad de los rayos del sol. La cantidad de tiempo que pasamos al sol, y la forma en que protegemos nuestra piel de ella, tiene un impacto considerable en la salud de la piel al limitar los efectos negativos del sol.
Factores internos que influyen en la forma en que la piel reacciona al sol.
Elija un producto de protección solar que haya sido especialmente formulado para su tipo y condición de piel.
Las diferentes pieles reaccionan de diferentes maneras al sol: